enrocada-enroscada

Queriendo cambiar la estrategia pasó a no preguntar edad, ni teléfono, ni estado civil, ni patologías. Nada de nada. Tampoco se quedó a dormir. A los 30 minutos salió escupida de la casa. Nadie puede entenderte así mujer.
Ella es tan, tan...
Y ahora no sabe nada, entonces tampoco tiene mucho que contar.
Conste que ella es una de esas personas que se interesan por esas cosas, busca detalles y se enamora de nimiedades que sólo una mujer puede ver, y no cualquier mujer. Pero justo ese día se encontraba harta de coleccionar detallitos, esa noche hubo tan solo esa clase de símil sexo, que ni siquiera vale para recordar. Seguramente con esta manera de actuar no se va a encontrar con la incertidumbre del después. Algo de eso hay.
En fin.
Le recomendé que vuelva a ser ella, en definitiva eso es lo que la hace ser quien es.